miércoles, 4 de enero de 2012

Cosas por las que sonreir

Después del anterior artículo bastante depresivo he recordado que guardaba estas imágenes del pasado día de Navidad y he sonreído de nuevo con la imagen de Bosco El Sonriente con esa expresión pícara que le ha valido por parte de su madre el apodo de Seductor, de modo que este diablillo inquieto pasará a los anales como Bosco El Seductor. ¿A que es guapísimo?.

Nos ha encandilado a todos incluida Paquita. Tiene el carácter y encanto de su padre cuando era un niño, correteando de acá para allá feliz de haber descubierto el placer de poder desplazarse sobre sus piernas y sonriéndole a todos mientras corre por la calle a lo loco. Recordé con él los días de carreras tras su papi en el parque de El Castro cuando al menor descuido mientras echaba el azúcar en mi café, otras mamás salían disparadas tras él que con sus veloces piernecillas ya estaba corriendo tras un perro, una pelota perdida o lo que fuese en el quinto pino. Muchas veces he temido que en una de esas escapadas alguien lo raptase porque era muy sociable y simpático y
ahora resulta que es EL quien corre detrás de su clon, yo lo llamo 'justicia cósmica'...

Y aquí están fotografiadas tres cosas por las que sonreir. Cada vez que se juntaban mis dos hijos varones con sus barbas canas y sus preciosos ojos verdes me entraba una ternura infinita y ahora que además tengo el clon de uno de ellos seguramente se me pone la expresión de ese padrino barbudo y me quedo sin palabras. ¡Dios, les amo tanto que no me cabe dentro!

3 comentarios:

  1. Pues menos mal, Deva, que pasan estas cosas buenas y maravillosas. Porque de lo demás es mejor no hablar.
    Enhorabuena a toda la familia.
    Un día de estos te mandaré alguna foto de mi nieto Moisés, que ya empieza a fijarse y reconoce la voz de su madre.
    Veremos qué mundo les dejamos a estos angelitos.
    Un abrazo.
    Miguel Ángel Pérez Oca.

    ResponderEliminar
  2. Abuelo duplicado,enhorabuena por ese pequerrecho nieto varón llamado Moisés que he podido ver en tu blog. En cuanto a la despedida del comentario que haces, ya el papi de Bosco el Seductor me hizo la misma pregunta siendo adolescente: ¿qué mundo estáis dejándonos, mami?, corría el año 1987 y desde entonces esa pregunta está por ahí resonando cada vez más perentoria. Por aquellos años yo no me sentía demasiado concernida ya que las mujeres teníamos escasa representatividad político-social pero como las féminas ya en tiempos del señor Caudillo reclamábamos con voz alta y estentórea la igualdad de sexos en escalones de poder fáctico acabamos por conseguirlo y ahí tenemos a la Dolores Cospedal transformando nuestro discurso progresista de izquierdas en un canto nacional-carpetovetónico propio de una Tiranosauria, parecería que estamos escuchando a una Dolores Ibarruri pero en el lado opuesto, al reverso de la medalla.
    Recuerdo un rifi-rafe que mantuvieron mi madre con su única nuera que iba de galleguista-progresista mientras mi madre cocinaba y yo la ayudaba comentando sobre ropa que queríamos hacerles a las niñas, el comentario de la nuera "progre" que no hacía "labores del hogar" pero eschuchaba la conversación comenzó por una carcajada seguida del comentario de que éramos ridículas porque las niñas con unos vaqueros de peto y unas botas comprados en un mercadillo estarían mas adecuadas en los tiempos que corrían ¡já,já já!. Mi madre saltó como un muelle y le dijo que nosotras éramos mucho más feministas que ella porque queríamos vestir a las mujeres como mujeres mientras que ella las quería vestidas como hombres macarras y ahí se terminó ese asunto 'de faldas', con un gol a la 'progre' cabizbaja por no saber qué responder.

    Recuerdo muchas veces esta y otras muchas 'sentencias' de mi madre, mujer de las de antes, de entonces y de ahora que hacía con éxito una labor social importantísima de guarderías infantiles para hijos de madres trabajadoras removiendo cielo y tierra para subvencionarlas vestida con su falda tubo y sus taconcitos, bien peinada y guapísima cuyo entierro fué una multidudinaria manifestación de afecto por parte de clases trabajadoras femeninas.

    Las mujeres no deberíamos renunciar a nuestra condición de mujer para convertirnos en hombres, no deberíamos tratar de eclipsarlos para escalar poder. Si algo valoro muchísimo de los gobiernos del Sr.Zapatero es esta característica igualitaria que tanto dió que hablar colocando al frente de las Fuerzas armadas a una mujer, joven y embarazada por mas señas y a tantas otras de impecable currículum académico. Ahora parece que les toca de nuevo el turno a 'las progres'... de derechas como la Espe,la Loli o la Botella que han de demostrar que no son lo que son y eso las puede conducir a una esquizofrenia peligrosa a nivel político.Las mujeres decididas a convertirse en hombres convierten en títere al mas pintado, tenemos buenos ejemplos históricos.

    La verdad, querido Micalet, es que de esta situación podemos esperar todo, sobre todo si los hombres de derechas están gobernados por mujeres 'progres' de derechas....bailando 'chunda chunda' el top less por los estrados y balcones...¡Dios nos coja confesados!.

    ResponderEliminar
  3. Desde las profundidades, arrastrado por una irresistible corriente emergente, tu prosa me arranca hacia la superficie.
    No solo en lo profundo es donde estan las cosas preciosas.
    Feliz Santo a Bosco
    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar